¿Has oído hablar de la Ley Antifraude o la Ley Crece y Crece? Si eres autónomo, administrativo o propietario de una pyme, es posible que lo hayas hecho. En los últimos meses han sido objeto de conversación entre las instituciones por plantearse como la nueva carta estrella para hacer frente al fraude con sus medidas, que tendrán que adoptar los colectivos mencionados.
Sin embargo, de acuerdo con un estudio de la consultora Grupo Aitana – Opentix, más del 80% de los trabajadores no están preparados para incorporar los cambios que traerán estas medidas. Eso, sumado al desconocimiento general sobre ellas, ha creado un escenario de inquietud para los trabajadores, que deberán adaptarse a ellas e incorporarlas en los próximos años.
Si eres de los aún no conocen del todo cómo afecta la Ley Antifraude en tu día a día, hoy te desvelamos todos los detalles que necesitas conocer. ¡No te pierdas nada!
Todo lo que debes saber
A continuación te detallamos las principales características de la Ley Antifraude. Descubre qué es esta ley y a quién le afectará, sus principales regulaciones y a partir de cuándo estarás obligado a introducirla en tu negocio.
La Ley 11/2021 o Ley Antifraude es una de las principales normativas aprobadas en España para prevenir el fraude fiscal mediante la regulación estricta de los sistemas de facturación. Como complemento de la Ley Crea y Crece, busca asegurar la trazabilidad de las transacciones y que queden registradas de manera fiable, sin ocultar o manipular datos contables.
¿A quién afecta esta medida?
Esta medida afecta a dos colectivos:
- Por un lado, todas las empresas y autónomos que emitan facturas y tengan sede en el territorio español.
- Por otro lado, a los fabricantes, productores y comercializadores de software de facturación, contabilidad o de gestión.
¿Qué regula la Ley Antifraude?
Ahora conoces un poco del contexto de la Ley Antifraude, pero, ¿qué regula exactamente y cómo nos afectará? Te lo resumimos en los siguientes puntos:
- Mayor control de las operaciones y ventas de los negocios. Se limita el pago en efectivo permitido a 1.000 euros (antes de 2.500 euros) a transacciones entre profesionales o empresarios, ya que para particulares podría haber ciertas excepciones, y se endurecen las sanciones contra programas que generan doble contabilidad.
- Aumentan las competencias de la Inspección de Hacienda para investigar a los contribuyentes. Esta normativa amplía las competencias de los inspectores de Hacienda para encontrar evidencias de fraude fiscal. Aun así, las entradas en domicilios requieren una autorización judicial previa, salvo en casos muy excepcionales y justificados.
- Reducción de recargos por pagar impuestos fuera de plazo. Se reducen las penalizaciones a un 1% por cada mes retrasado, con un máximo de 12 meses. Además, se reduce la cuantía para aparecer en la lista de deudores de Hacienda a 600.000 euros.
- Introducción del sistema Verifactu o sistema de facturación electrónica verificables. Por cada factura emitida, las empresas deberán generar un registro y decidir si envía voluntariamente a Hacienda con el sistema Verifactu.
¿Cuándo será obligatoria?
Hasta hace poco, la fecha límite oficial que se estableció para que las empresas tuvieran un programa de facturación adaptado a los requisitos legales era el 29 julio de 2025. Sin embargo, a mediados de noviembre el Ministerio de Hacienda tomó la decisión de ampliar este plazo a 2026. Será entonces cuando las empresas señaladas estén obligadas a enviar su facturación de forma automática.
No obstante, tal como indican numerosos informes y estadísticas, se aprecian nubes grises sobre los autónomos y pymes. Entre ellos el estudio realizado por la consultora tecnológica Grupo Aitana – Openti, que señala que únicamente el 16% de los implicados se ha digitalizado. Eso, sumado al gran desconocimiento de estas leyes y los cambios que introducirán, así como el rechazo hacia programas informáticos para hacer facturas o pocos conocimientos digitales para ponerlos en marcha, crean un panorama en el que se debe educar, modernizar y planificar para estar preparados.
¿Cuáles son las sanciones en caso de no cumplir con la Ley Antifraude?
En caso de no cumplir con los requisitos de la Ley Antifraude, las empresas y autónomos serán susceptibles de recibir sanciones económicas que pueden alcanzar los 50.000 euros. Además, también podrían hacer frente a este tipo de sanciones las empresas fabricantes de software que comercialicen un software que no esté homologado por la administración.
¿Podré seguir firmando con Excel?
Son muchos los autónomos y empresas que hacen uso de programas como Excel, Word o PDF para llevar a cabo sus factores y datos de contabilidad. Sin embargo, la Ley Crea y Crece y la Ley Antifraude obligarán a emitir facturas electrónicas a partir de 2026, usando para ello un programa homologado que cumpla con determinados requisitos. Los formatos Excel, Word y PDF no cumplen con medidas de seguridad ni trazabilidad, por lo que los trabajadores deberán dejar de usarlos una vez llegue la fecha límite.
Un paso hacia una economía más transparente
Esperamos que con de esta entrada del blog de Viafirma hayas entendido un poco mejor los aspectos principales de la Ley Antifraude. Sin duda, es un gran paso hacia una economía más transparente y digitalizada, que brindará la oportunidad de modernizar procesos y mejorar la eficiencia fiscal.
Eso sí, como señala el informe de Grupo Aitana – Opentix, también supone un gran reto para autónomos y pymes, que deberán planificarse y adaptarse a ella. Así, alcanzaremos un futuro más seguro en términos financieros.