Los pasados días 21 y 22 de noviembre tuvimos el placer de asistir como ponentes al hackfest de seguridad y firma digital organizado por la Universitat Jaume I y Cenatic, en Castellón.
El tema central de las ponencias y talleres organizados durante las jornadas giraba alrededor de la movilización de la firma digital, donde se expusieron los avances en este segmento por los distintos actores del mercado.
Nuestra participación estuvo dividida en dos jornadas. En la primera de ellas mostramos nuestra experiencia con la firma móvil hasta llegar a movilizar el DNI electrónico. Al día siguiente aplicamos la teoría con un taller práctico, donde abrimos un Eclipse, montamos una aplicación desde cero que consumía los servicios de Viafirma desde un iPhone y firmamos con DNI electrónico.
La firma móvil, nuestros antecedentes
Antes de llegar a dar nuestros primeros pasos con la firma móvil cumplimos algunos hitos que nos identificaron con las minorías, hitos que nos marcaron un objetivo que no era otro que convertir la firma electrónica en la «firma universal«, intentando mejorar la experiencia de usuario y desmitificar las barreras y reticencias encontradas en este sector.
Con ello, en 2007 liberamos lo que sería la primera plataforma de código abierto para el reconocimiento del DNI electrónico sobre Linux, y al año siguiente ofreciéndolo también para usuarios MACOS.
Pero no fue hasta 2010 cuando lanzamos el primer cliente de firma móvil del mercado para iOS y Android, con soporte para firma electrónica basada en el uso de certificados en formato PKCS#12, instalados dentro del dispositivo. Al año siguiente repetiríamos otro lanzamiento pionero, esta vez para el renovado Windows Phone 7.
Números
Desde entonces, y gracias a las estadísticas de uso obtenidas principalmente por Viafirma Manager en nuestro entorno de firma en la nube, podemos manejar números interesantes.
En números relativos, resulta interesante el uso de las cuatro plataformas móviles soportadas con su mayor o menor relevancia, pero si comparamos esos números con el mismo período de registro de operaciones realizadas desde dispositivos desktop, comprobamos que aún estamos en pañales; un 1% de firma móvil vs. al 99% de firma escritorio.
Si estas métricas las estudiamos desde el punto de vista de las Autoridades de Certificación involucradas, observamos que el patito feo en este caso sería el DNI electrónico, que también supondría el 1% de uso frente al resto de CAs.
Repitiéndose esta métrica también en el entorno de la Fundación Tripartita como se muestra en esta otra gráfica.
Y con estos números pensaréis, ¿y qué os hace pensar que movilizar el DNI electrónico va a suponer un éxito? ¿Estaremos, por tanto, apostando nuevamente por las minorías? Probablemente, sí, y nos encanta. Democratizar la firma electrónica, haciéndola universal, accesible desde todos los sistemas operativos y dispositivos móviles nos parecían suficientes méritos para un público al que no podíamos abandonar con nuevos retos, y en este caso, el reto fue motivador, MOVILIZAR EL DNI electrónico.
El resto ya lo conocéis, siempre intentando innovar, siempre intentando dar un pasito más para intentar ser referente en la «universalidad» de la firma electrónica y, en algunos, siempre agradecidos al reconocimiento de nuestro esfuerzo como el reciente Premio ENISE 2012 (INTECO) a la mejor solución de seguridad en movilidad.